Sentencia muy interesante donde el Tribunal de Primera Instancia de las Comunidades Europeas analiza una decisión de la Comisión que sancionó a un grupo de empresas que tanto a nivel mundial como europeo habían formado un cartel para controlar el mercado del gluconato sódico.
Destaca la argumentación de los hechos, el uso de pruebas indiciarias o indirectas y el análisis económico con relevancia jurídica de la conducta y prácticas concertadas de las empresas involucradas.